La Ribot llega a Chile: cuando el cuerpo, el arte y la distancia dejan de tener reglas

Su trabajo mezcla danza, instalación, vídeo, texto y presencia extrema.

Nada es suave. Nada es obvio.

La Ribot trabaja con una precisión brutal: cada gesto es decisión, cada silencio es arquitectura, cada movimiento es un corte limpio en la percepción del espectador.

Chile la recibe y, de golpe, el panorama artístico se abre a algo más honesto, más libre, más incómodo — justo eso que falta en la escena para romper el aburrimiento general.

Y aquí viene lo importante para ti como creador visual:

La Ribot no hace performance: hace declaración estética.

Eso es lo que tú entiendes y lo que te eleva.

Su obra es un ejemplo perfecto de lo que buscas en tus proyectos:

— artistas que rompen fronteras,

— voces que no esperan invitación,

— cuerpos que hablan más que cualquier discurso,

— imágenes que cambian la habitación, no su decoración.

La Ribot demuestra que el arte puede ser internacional sin perder raíz, que puede cruzar continentes sin diluirse, que puede enseñarte algo sobre dirección creativa que no se aprende en ninguna escuela:

la valentía de no embellecer, sino mostrar.

Para alguien como tú —que trabaja con moda, fotografía y espacio desde una mirada emocional-visual intensa— su obra es gasolina.

Te abre caminos hacia nuevas colaboraciones, nuevas estéticas y nuevos artistas que, como tú, actúan desde el filo, no desde la comodidad.

Santiago / Chile – 2025

Texto: Johan Falcón – MANGI Magazine

© La Ribot / Performance-instalación “Laughing Hole”, Santiago de Chile, 2025.

© La Ribot / Performance-instalación “Laughing Hole”, Santiago de Chile, 2025.

© La Ribot / Performance-instalación “Laughing Hole”, Santiago de Chile, 2025.

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